
"No tenemos nada que decir, nuestras reglas están como están", aseguraba al diario úblico el hermano mayor del Silencio, Antonio Rodríguez Cordero. Más directo y rotundo fue aún su homólogo en el Santo Entierro en el mismo periódico: “Mi hermandad no tiene nada pensado sobre la inclusión de nazarenas, al menos para este año; de lo que estoy pendiente ahora es de la Ley del Aborto del Gobierno, que es lo que de verdad me preocupa", aseguró Luis Miguel Onieva Giménez.
En fin… con la Semana Santa a la vuelta de la esquina, con el voto afirmativo de los hermanos del Gran Poder, la Madrugá sevillana de 2010 será histórica. De los 10.000 hermanos del Gran Poder, aproximadamente una cuarta parte son mujeres. Mujeres a las que durante años hemos visto detrás del señor cubiertas con sus bolsas de plástico para protegerse de la cera. Mujeres que ya podrán cambiar ese plástico por su antifaz negro de ruan.
Que el Señor del Gran Poder les conceda que el próximo Viernes Santo las que quieran, puedan realizar su estación de penitencia.